Risotto con zanahorias caramelizadas
La combinación de arroz y zanahoria no suena muy emocionante al principio, ¿verdad? Para mí, me recuerda a un puré para bebés más que a un plato sabroso. Pero dado que tal tema entraba en el contexto de cocinar con Ania, Emilia y Ginebra, Decidí aceptar el desafío.
Mi elección recayó en el risotto, que, debidamente preparado, puede convertir incluso las combinaciones más banales de ingredientes en un plato único. Así fue esta vez. La zanahoria dulce y caramelizada combina a la perfección con el arroz cremoso y se complementa con queso parmesano y hierbas frescas. Créame, a este plato no le falta carne ni nada más. Simplemente sabe muy bien.
RISOTTO CON ZANAHORIA CARAMELIZADA
(4 porciones)
- 6 zanahorias medianas,
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 cucharadas de mantequilla
- 1 cucharadita de azúcar
- aprox.3 vasos de caldo de verduras,
- 1 cebolla
- 300 g de arroz para risotto (por ejemplo, arborio),
- ½ copa de vino blanco seco,
- 60-70 ml de crema espesa,
- 100 g de queso parmesano recién rallado,
- perejil,
- tomillo fresco,
- sal marina,
- pimienta recién molida
Pelar las zanahorias y cortarlas en cubos pequeños.
En una sartén profunda, caliente 1 cucharada de aceite de oliva y 1 cucharada de mantequilla. Cocine a fuego lento durante un minuto, revolviendo, luego agregue ½ vaso de agua. Agrega una pizca de sal y 1 cucharadita de azúcar. Tape y cocine durante 5 minutos, luego retire la tapa y cocine a fuego lento durante unos minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que toda el agua se haya evaporado y las zanahorias comiencen a dorarse ligeramente. Coloque las zanahorias en un plato aparte, reserve la mitad para más tarde, y licue la otra mitad con una licuadora hasta hacer puré, agregando ¾ vaso de agua.
Vierta el aceite de oliva restante en la sartén de zanahorias y agregue la cucharada restante de mantequilla. Agregue la cebolla picada y cocine a fuego lento durante 1-2 minutos, revolviendo hasta que esté suave. Vierta el arroz y mezcle bien hasta que esté cubierto de grasa. Vierta el vino y cocine hasta que se evapore. Agregue el puré de zanahoria y cocine a fuego lento durante unos minutos hasta que espese. Luego agregue el caldo en porciones y cocine a fuego lento, tapado, revolviendo ocasionalmente, hasta que el arroz esté suave y cremoso (agregue más caldo si es necesario, la cantidad depende del tipo de arroz).
Cuando el arroz esté cocido, retire la sartén del fuego, agregue casi todas las zanahorias sobrantes (2-3 cucharadas para decorar), crema espesa, la mitad del queso parmesano rallado, 1 cucharada de perejil picado y 1 cucharadita de tomillo, sazone con sal y plumas, mezcle bien.
Adorne cada risotto con las zanahorias caramelizadas restantes, el queso parmesano restante y el perejil picado.
(basado en la receta por esocon mis cambios)